Medioambiente: desafíos y oportunidades para las empresas
Entre la empresa y el medio ambiente existe una relación armónica: la empresa juega
un papel protagonista en la búsqueda y aporte de soluciones tecnológicas a los
problemas medioambientales y para la empresa el medio ambiente constituye un
mercado en rápida expansión y una oportunidad de negocio y de creación de empleo,
constituyendo además, una parte importante en la imagen, obtención de beneficios, con
el objetivo de integrar progresivamente los criterios de preservación del entorno en los
procesos de decisión económica de las empresas
El respeto a las exigencias elevadas en materia de protección medioambiental ha
pasado a ser progresivamente considerado, en lugar de un coste adicional, una fuente
de ventajas competitivas; por sus consecuencias para comerciar libremente, el impulso
al desarrollo tecnológico y a la modernización y racionalización de los procesos
productivos y la mejora de la imagen de marca de la empresa y del producto, no solo
frente a los consumidores sino también frente la parte social de la empresa.
El medio ambiente como fuente de ventaja competitiva
El entorno empresarial ha experimentado importantes cambios desde la aparición de un
consumidor ecológicamente responsable hasta el desarrollo de una estricta legislación
medioambiental, pasando por trabajadores, inversores y vecinos que tienen en cuenta
el comportamiento social y ecológico de la empresa. En definitiva, se trata de un
entorno que exige a la empresa el diseño de sus objetivos teniendo en cuenta una
dimensión social y ecológica de la misma que complemente a su dimensión económica.
Los directivos no pueden cerrar los ojos ante esta evolución del entorno si desean
mantener la capacidad competitiva de su empresa. No se trata de asumir la
responsabilidad social de la empresa por razones éticas sino por mera cuestión de
supervivencia.